viernes, 17 de marzo de 2017

Confianzas y amistades

Espero que disfrutéis esta presentación en la que nombro algunos de los muchos motes que hay en la clase de Informática.

viernes, 10 de marzo de 2017

La Acrópolis

Hoy me gustaría hablar un poco sobre la Acrópolis de Atenas, ese mítico lugar de la Antigüedad Clásica donde los más ilustrados pensadores de la época (y los no tan ilustrados) se reunían para hablar y debatir. Era un sitio bastante parecido a los foros romanos, donde las personas de la ciudad en cuestión se encontraban para charlar sobre la situación política, sobre cualquier inquietud e incluso para comerciar.

Pincha aquí para conocer la Acrópolis

Sin embargo, y por desgracia, estos lugares ya no se encuentran en la actualidad, ya la gente no quiere "malgastar" su tiempo hablando de cosas "sin importancia". La verdad es que esta situación es un poco lamentable, y confío en que mejorará con los años. Confío en que con el paso del tiempo se le dará más importancia a la reflexión y a a la argumentación. Confía en que la filosofía se convertirá en algo que la gente deje de odiar.

Y eso es todo, lamentarse de la actual situación, este es el fin de la entrada... o quizás no. No, creo que no. Este va a ser un final inconcluso. La historia todavía está por escribirse, y todavía tienen que venir al mundo muchas personas que, probablemente, sepan valorar de una manera más justa lo que es realmente necesario para la Humanidad, y lo que no. Valorarán que la Humanidad necesita la Filosofía ahora más que nunca, y eso es obvio.

jueves, 16 de febrero de 2017

Caminos y amigos

Si nos paramos a pensar, podemos ver la cantidad de gente que hemos conocido a lo largo de los años. Para empezar, me gustaría que esta entrada la leyeran todos mis compañeros a los que aprecio y estimo.
Primeramente, conocí a un señor un poco cabezón, Isaías, quien me lleva acompañando y aguantando desde hace varios años. Sinceramente y con cariño, desde aquí le doy las gracias por todos los momentos pasados.
Más tarde vinieron una hormiga y un muelle, y nos hicimos muy buenos amigos. Simplemente por los apodos, ellos saben quienes son, y desde aquí, gracias por acompañarme.
Seguidamente, conocí a un doctor, experto en tratamientos sanguíneos, a un peluquero con peluca y prestigio y a un marinero pirata que ha conseguido surcar los siete mares, y desde aquí, quiero agradecerles todo lo que han hecho por mí, por todos los momentos pasados y los que vendrán.
Y muchas personas más que he conocido y que se han cruzado en mi vida: un chaparrón, un leñador, un asiático coreano, una piedra, un conejo y muchos más que vendrán. Pero de momento, a todos los que conozco, gracias por acompañarme en este camino, en este viaje, en esta vida. Gracias.